Virginia Alabarce, directora de Establecimiento La Cumbre, detalla la experiencia de la compañía en elaboración a fazón y su compromiso con la calidad y la innovación.
“Nos diferencia la trayectoria y la confianza construida durante más de 20 años elaborando a fazón para empresas líderes del mercado local”.
La Cumbre se especializa en la elaboración de productos alimenticios, combinando tradición, calidad e innovación, explicó Virginia Alabarce a Info Marcas Propias. “Desde hace más de cuatro décadas, acompañamos a nuestros clientes con soluciones a medida, adaptándonos a las tendencias del mercado y a las necesidades nutricionales de los consumidores”, señaló.
La actividad de La Cumbre se sustenta en procesos certificados y eficientes, un equipo humano comprometido y la incorporación constante de tecnología de vanguardia, garantizando productos confiables y de excelencia para sus propias marcas y para marcas líderes que los eligen para elaborar a fazón.
La empresa, fundada en 1982, cuenta con cuatro plantas industriales: dos de propiedad cien por cien familiar, ubicadas en Rosario y Alvear, y otras dos en sociedad con su principal cliente, en Corrientes y Santiago del Estero. En Corrientes, se elaboran productos libres de TACC, siendo la primera planta certificada FSSC 22000 libre de gluten, mientras que en Santiago del Estero se producen galletitas fortificadas, barras de cereales y snacks salados, también certificada bajo FSSC 22000.
Alabarce destacó que “lo que nos diferencia es la trayectoria y la confianza construida durante más de 20 años elaborando a fazón para empresas líderes del mercado local”. La compañía combina flexibilidad y escalabilidad en su producción, adaptándose tanto a grandes volúmenes como a lotes específicos, respaldada por un equipo especializado y tecnología de última generación, integrando además prácticas de sostenibilidad con impacto económico, social y ambiental.
Aliados para seguir creciendo
Sobre el desarrollo de las marcas propias en Argentina, señaló que “están teniendo un crecimiento sostenido, consolidándose como una alternativa de valor para los consumidores y una oportunidad estratégica para las cadenas de retail”. Destacó que La Cumbre juega un rol clave al aportar experiencia y profesionalismo para mantener consistencia y confianza en la calidad de esas marcas.
En relación al trabajo a fazón, Alabarce especificó que consiste en “elaborar productos para terceros bajo sus propias marcas, cumpliendo con especificaciones técnicas, estándares de calidad y plazos establecidos. No nos limitamos a producir, sino que trabajamos como aliados estratégicos, asegurando que el producto final cumpla con las expectativas de los consumidores y con el prestigio de la marca que representamos”.
Entre los proyectos actuales, La Cumbre está incorporando una nueva línea de producción de alfajores para responder a la creciente demanda de marcas propias y, en la planta de Santiago del Estero, una línea de snacks salados. Además, avanza en la implementación de energía solar en sus plantas y proyecta continuar fortaleciendo el trabajo a fazón, expandiendo su oferta y explorando mercados internacionales.
Finalmente, Alabarce remarcó: “Además de nuestro rol productivo, creemos que las empresas tienen la responsabilidad de generar impacto positivo en la sociedad”. La Cumbre impulsa programas de triple impacto —económico, social y ambiental— que incluyen voluntariado, proyectos de inclusión laboral y acciones comunitarias a través de su programa Ricos Momentos, reafirmando su visión de ser una empresa con propósito, innovadora y sustentable.
Fotos: La Cumbre